Sobre un sitio con preexistencias patrimoniales, se plantea intervenir con un edificio híbrido que apuesta por la revitalización del deteriorado barrio en el que se encuentra, al completar un cir¬cuito triangular compuesto en sus otros dos vértices por el paseo 21 de mayo y la plaza Wheelwright. El programa sugerido, un mix de vivienda, comercio, turismo y espa¬cios públicos, busca dotar de multiplicidad y dinamismo al sector, aumentando su potencial original.
El proyecto se resuelve en dos cuerpos: un zócalo público, que soluciona la abrupta topografía, los accesos múltiples y la relación con las preexistencias patri¬moniales; y un volumen de vivienda, levantado estratégicamente para alcanzar más orientaciones y transformar al edificio en un hito: la proa de la manzana. Materialmente el zócalo es pétreo, una topografía artificial, en cambio el volumen de vivienda es liviano, una caja de madera y latón puesta encima.
Programáticamente, en el zócalo hacia la Av. Carampangue, se propone comercio local y el acceso a las viviendas; mientras que hacia la subida Artillería, comercio turístico y espacios públicos que sorprenden al peatón y dan soporte al programa. El volumen de vivienda, se articula en torno a un núcleo com-pacto que y permite dividir la planta tipo en tres departamentos diferentes, todos con vista y asoleamiento.
Interiormente, se propone como premisa para las viviendas la fle¬xibilidad de usos y límites de los recintos, acorde al tipo de usuario al que se apunta. Éste valora la vida urbana, llevando usos hogareños a la ciudad, al mismo tiempo que usa de manera diferente su vivienda, trayendo usos urbanos a su casa, como el trabajo, ejercicio, hobbies, etc. Por esta razón, cada vivienda se compone de elementos fijos y móviles que permiten distintas configuraciones espaciales.
CNPT 2012 – Proyecto ganador