El bloque 1010 es la tipología de vivienda social más replicada en la historia del país. Sin embargo, su serialización no consideró a la energía como variable, desnudándose asuntos de control térmico y protección solar. Por otro lado, su implantación urbana no consideró asuntos de sustentabilidad, transformándose sus espacios comunes en focos de obsolescencia y delincuencia. Hoy la tipología requiere ser repensada en el marco de un cambio generacional y sus exigencias programáticas, tomando en cuenta estándares ambientales y sociales contemporáneos.
Se considera el diseño de una propuesta tipo de reconversión, adaptable a la totalidad de los conjuntos de la serie.Dado que los 47 m2 del 1010 no cumplen la normativa mínima (55m2), se considera una ampliación de 17 m2 por departamento, traducida en una extensión de 2 metros a lo largo de las fachadas oriente y poniente de cada bloque, usando una estructura independiente compuesta por módulos de acero ensamblados en obra. Por otro lado, se eliminan los antepechos existentes para formar una “planta libre”, flexible a la reorganización según los criterios de la familia o el nuevo residente.
Las estrategias pasivas consideran un trabajo de espesores (aislación) y aberturas (vanos), los cuales equilibran las ganancias y pérdidas energéticas. Los vanos se disponen en razón de un ritmo de 1:3, cubriéndose de alféizares para proteger de la radiación a los termopaneles, mientras que la aislación varía su espesor siguiendo la orientación.
Finalmente, se propone diseñar los vacíos del entorno tejiendo los bloques mediante un sistema de parrones y patios. Los patios contemplan los diferentes programas para el uso vecinal, plaza dura, patio de juego, patio de cultivo, etc., mientras que los parrones contemplan variaciones según orientación o zona climática, cerramientos, parrón, techo, etc.
CNPP 2021 – Mención 4to y 5to año